La técnica encáustica, que deriva del griego enkaustikos (‘grabar a fuego’), es una técnica de pintura que se caracteriza por el uso de la cera, resina de Dammar y pigmentos. Vitruvio, arquitecto e ingeniero romano (c. 70–25 a. C.) la describía así:
«Hay que extender una capa de cera caliente sobre la pintura y a continuación hay que pulir con unos trapos de lino bien secos.»
La encáustica se puede utilizar sobre fotografía como técnica mixta para aportar texturas y protección a la copia.
El resultado final es muy pictórico. Es un viaje en el tiempo, por los albores artesanos de las bellas artes y la fotografía.
Para crear una fotografía encáustica podemos seguir los siguientes pasos:
- Reproducir la fotografía en plotter/impresora de inyección de tinta.
- Adherir la copia sobre un tablero de madera (DM, MDF).
- Derretir la cera de abeja y la resina de Dammar (150-180ºC). El porcentaje que he utilizado es de 80% de cera y 20% de resina.
- Calentar con una pistola de calor (baja temperatura) la superficie de la fotografía.
- Comenzar a aplicar una primera capa de la cera+resina derretida con un pincel de cerdas naturales. Seguir el trazado de la fotografía.
- Con la pistola de calor podemos eliminar los excesos de cera.
- Aplicamos una segunda capa de cera+resina.
- Terminamos refinando con la pistola de calor.
- Tras dos o tres días para que la cera+resina se endurezca, se procede al pulido con un paño de lino.
Opcionalmente, se pueden emplear pigmentos (el gris de Paynes es muy utilizado) sobre la cera+resina y aplicar rasguños y pequeños arañazos sobre la copia.
Mi amigo y pintor Pepe Alba me pidió que le hiciera este bodegón para que pudiera hacerlo al óleo en su estudio de Londres.
Tras dos años durmiendo el sueño de los justos, pensé que este bodegón quedaría bien aplicando la encáustica. Aquí tenéis el resultado. Una pieza de 60x37cm sobre tabla de 20mm de grosor.
Detalle de la pieza: