Algunos amigos me han preguntado por qué no colocaba en el centro a los protagonistas de las escenas.
¿Se trataba de alguna manía? ¿Por qué los puntos de interés los descentraba?
Bueno, en realidad colocar al punto de interés centrado en la imagen es el segundo error más frecuente de los neófitos en este arte (el primero es no acercarse lo suficiente al protagonista).
La cabeza del protagonista en el centro de la imagen, arriba, a la derecha y a la izquierda espacio sin interés y por abajo los pies cortados… estamos hablando del Ojo de Buey.
El Ojo de Buey es una toma que proyecta una sensación estática de la escena, lo que se sintetiza en una imagen que proporciona poco interés al espectador.
Para ilustrar la teoría he seleccionado una escena muy simple: Un solitario árbol en un verde prado. En la primera toma, presentamos el punto de interés centrado en la imagen.
En el segundo ejemplo hemos descentrado el punto de interés.
Como podréis comprobar la segunda opción es más atractiva y sugerente que la primera.
El uso de la Regla de los Tercios y otras reglas y leyes compositivas nos ayudarán a captar imágenes dinámicas, con fuerza y belleza que cautivarán al espectador.
Las normas y leyes de composición nos ayudan a crear con ciertas garantías imágenes atractivas, aunque conociéndolas y a propósito se pueden y deben romper algunas veces para conseguir otros efectos o resultados.
como todo la teoría parte de la práctica, y la verdad esq la segunda fotografía es muchísimo más atrayente… así somos los humanos… caos por naturaleza 😀
Muy buena observación, Juan. Siempre que estoy prestando atención a los detalles, trato de seguir la regla de los tercios.
Una cosa que quisiera leer de vos es algo sobre el sistema de zonas (o el Zone System, no se si inventado pero si perfeccionado por el grande Ansel Adams)
Un abrazo,
Luis
Muchas gracias por los comentarios.
Luis, hace tiempo que intento preparar un artículo sobre el sistema de zonas actualizado, pero todavía no lo tengo preparado.
Y no paran de decirte; «ponte en el centro, ponte en el centro, que se te vea bien..» y luego van y te cortan la cabeza a la altura de la nariz.
😉
En fins…!
Abrazo, amigo
[…] nista estuviera en el centro de la imágen, para no caer en el […]
[…] nieve fue todo un placer. En este caso, elegí unos encuadres […]
[…] limiento de la Regla de los Tercios (147 clics) y evitando el […]
«Bueno, en realidad colocar al punto de interés centrado en la imagen es el segundo error más frecuente de los neófitos en este arte»
Pues yo creo que en fotografía, como en la mayoría de las demás artes, no suele convenir hablar de reglas, menos aún cuando se habla de composición. No hay fotografía más grimosa que la que no tiene nada que enseñar pero ha marcado unos tercios perfectos.
Javi, es cierto que al Arte no debemos ponerle límites y que las reglas pueden «encorsetar» la creatividad del autor, pero desde el punto de vista más pragmático creo que es conveniente conocer las reglas básicas de composición y después… el artísta «realmente» será libre de hacer lo que crea conveniente.
Podrá seguir las reglas o saltarlas. Eso es libertad. No se es más libre por no conocer las reglas.
Gracias por registrar tu punto de vista, Javi.
Encuentro apropiado tener presente el sistema de los tercios, aun cuando el desarrollo de la fotografia como una arte permite jugar al mostrar la propia vivencia y transmitir al lector su vision.
Para no caer en los errores de las tomas fotográficas en cuanto a composición, una de las preguntas básicas del fotógrafo debe ser: «Qué pretendo con lo que quiero fotografiar». Su respuesta le indicará infinidad de opciones al fotógrafo. El el caso del centrado o los dos tercios si la respuesta es mostrar exclusivamente ciertos detalles propios del árbol para información específica al observador evitando cualquier tipo de distractor, el encuadre en la toma o en la manipulación digital debe ser totalmente centrado eliminando sus contornos.
Si la respuesta es ubicar el árbol en su entorno o simplemente atrapar el encanto del paisaje, el encuadre será el de los dos tercios verticales a la derecha o a la izquierda.
En los ejemplos dados, independientes del encuadre, noten adicionalmente que el horizonte «corta» al objeto principal en sus dos tercios. Estupendo logro intencional o reflejo de simple armonía artística.
MUCHAS GRACIAS .. este blog me ayudo muchisimo y los ejemplos son tan claros y precisos, no tengo palabras no sabe cuanto me ayudo para hacer mi informe.. gracias
saludos desde Bolivia
Estoy empezando en esto de la fotografía, aunque ya tengo mis añitos. Quería comentar que llevo oyendo lo de la regla de los tercios y demás reglas de composición en fotografía y debo de ser muy rarito, pero a mí las fotografías que más me gustan generalmente son las que según los expertos están «mal compuestas». A mí, particularmente, la toma del arbolito centrada me dice mucho más que la segunda, que aún me sigue dando dolor de cuello. Lo dicho, debo de ser rarito
segun mis profesores, el problema de centrar al sujeto en la composicion, y más que todo cuando es un sujeto muy simetrico, es que los hemisferios del cerebro pelean por interpretar la imagen, lo que genera una sensación de confusión e incomodidad.